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martes, 5 de mayo de 2015

Guadalupe Plata, Ceremoney, The Wheels, Island Cavall (Sala Luna. Maracafest. 30.04.2015)


Guadalupe Plata
Ceremoney
The Wheels
Island Cavall

Maracafest

Lugar: Sala Luna. Gran Maraca Club
Fecha: Jueves 30 de abril de 2015. 23:00


Guadalupe Plata entró en mí (más bien fui poseído)  durante los primeros segundos en los que escuché uno de los temas de su primer disco Guadalupe Plata (Folc Records, 2011) y sí, si hay alguien que de alguna manera sea seguidor de este blog, sea por iniciativa propia o por mis bombardeos a través de redes sociales, decía que sí, que evidentemente la fuente que pinchó la música de estos tres músicos no puede ser otra que Carne Cruda. Cansino, dirán algunos. Pero me quedo impasible y reivindico (aunque no le hace demasiada falta) el programa radiofónico. Siguiendo con el grupo, en el año 2013 publicarían el que sería su segundo álbum de estudio, nuevamente sin título por lo que podríamos decir: Guadalupe Plata (Heverlasting Records, 2013). El disco era (y es) una especie de involución al hacer un disco más sucio y más grasiento todavía, arrastrando su blues pantanoso. Ofreciendo un álbum arriesgado y para el que escribe de máxima calidad. Afianzando su gran personalidad y defendiendo su manera de entender la música, alejadísima de cualquier circuito comercial. Entonces, precisamente en 2013, me quedé con las ganas de verlos. Estuvieron en Mallorca precisamente tocando en el aquel entonces Jarana Club (ahora Maraca Club). El motivo de mi ausencia era de fuerza mayor. El sentido común hacía acto de presencia para no comprometerme con los tres diablos. Por lo que cuando me entero de que en este 2015 vuelven de mano de los mismos promotores a presentar su tercer álbum Guadalupe Plata (Everlasting Records, 2015) no lo dudo ni un segundo y la marca en el calendario es inalterable.

Esta noche, dentro del Maracafest, aparte de los mencionados Guadalupe Plata actúan: Islando Cavall, The Wheels y Ceremoney. Y entre actuaciones, los DJ’s Sebas Avilés (ex profesor de servidor) + Clavo Pincha, Watermelons, Maraca Dj’s… seleccionan música para el Maracafest.



Island Cavall. Al haberlos visto hace escasas semanas y al tener prácticamente las mismas sensaciones, me remito a la crónica que escribí en su momento. Eso sí, aprovecho para presentar la fotógrafa que ha tenido la amabilidad de colaborar con el blog. Laura G. Guerra, como ya sabrán muchos, es una de las más activas en la escena mallorquina y con calidad más que evidente. Así que, al menos incluyo una de las fotografías del grupo.


The Wheels. Ofrecen un directo bien contundente. Temas que beben de muchísimas influencias. En algunos momentos puntuales percibo algo de Pink Floyd. Solo pinceladas. También hay algo británico en su música, que se podría intentar definir, o mejor dicho englobar, en etiquetas como pop, psicodelia, rock… The Doors también se pronuncian. Incluso percibo algo de música Indie. Porque no. Entonces el concierto que ofrecen está a gran nivel. Los músicos demuestran gran calidad en técnica y ejecución. Canciones con grandes momentos. Diría que con luminosidad y optimismo. Creando temas in crescendo donde la  intensidad resulta efectiva haciendo vibrar al público. Buen conjunto que por lo que anunciaron, están a punto de publicar el que será su primer álbum largo después de la publicación de un Ep en el año 2013.


Durante el transcurso del concierto de Ceremoney, no puedo evitar que me vengan a la cabeza los Happy Mondays. Hay algo del famoso Manchester Sound en su música (y no solo en el evidente nombre del grupo), y claro, viene a la palestra el sello discográfico Factory Records, pero también me vienen a la cabeza algunos de los grupos punk-rock de la época de los noventa como por ejemplo los NOFX. Cosa mía. Tal vez los integrantes del grupo piensen que voy equivocado. Pero bueno. Eso sí, hay en su música aquella transmisión de buen rollo. A destacar el guitarrista Aleph Tertön (guitarrista y teclista de Satellites) que además de dotar al conjunto de una sonoridad bien contundente, en el escenario da todo de sí y ofrece, más si cabe, su visión personal de lo que siente y así lo transmite. Bien acertada me parece la decisión de incluir en el grupo un percusionista (Lluís Galvá) que dota al grupo de cierta sonoridad tropical. (Claro, ahí está el título de su disco Psicho Tropic (Jarana Records, 2013)) El concierto es una fiesta en la que desgranan tema tras tema y el público lo agradece.  A tener muy en cuenta.



A altas horas de la madrugada sube al escenario el trío de Úbeda. Los diablos del blues más punk del panorama español. Guadalupe Plata. Y cabe decir que desde el inicio ofrecen un concierto de suma cum laude. Y es que la música de Guadalupe Plata en directo es altamente sucia. Viciosa y agresiva. Consiguen, y es algo realmente complicado en estos tiempos, éxito de público y crítica haciendo una música que según mi opinión, no tiene nada de fácil. El concierto que plantean en el Maracafest empieza de manera muy instrumental. Con grandes momentos de distorsión en los que el público, no puede dejar de moverse desde el primer segundo. En los que van desgranando algunos de los temas de sus tres discos publicados y que además, transforman e interpretan según (imagino o creo) avanza la noche y según las sensaciones. La voz afilada de Perico de Dios secciona el aire, y este sangra. Tengo la impresión de que entra en juego la improvisación en muchos momentos y la diversión diabólica se mezcla entre los asistentes. Aunque el cansancio hace mella en mí. En mi cuerpo más bien dicho. Este se mueve sin remedio. Es completamente imposible no caer ante el embrujo. Y sudar. Y rozarse inevitablemente ante la avalancha de suciedad musical. Inolvidable.


Hay que agradecer el esfuerzo que están haciendo los responsables del Gran Maraca Club al programar música de muchísima calidad y además apostando muchísimo por los grupos locales que, como es evidente, tienen muchísimo potencial. Palma, está en un momento muy bueno con muchísimas propuestas cada semana, pero queda mucho por hacer en el resto de la isla. Efectivamente se programan buenas propuestas pero con  muy poca frecuencia. El potencial del que hablo, debería poder disfrutarse en ciertos puntos. Pero ya se sabe. Puede que sea un problema crónico. En todo caso, mi apoyo incondicional a todo el que programe música hecha desde dentro. Tenemos el ejemplo de ciertos colectivos en Manacor (Altraveu, 39 escalons, Renou Col.lectiu…)o el increíble Teatre de Lloseta entre otros.

A las seis de la mañana uno consigue llegar a su cama siendo consciente de que en pocas horas. En muy pocas horas va a sufrir una avalancha por su propia sangre. Buenos días.

Texto: © Jesús Mateu Rosselló, 2015
Fotos: © Laura G.Guerra, 2015

miércoles, 18 de marzo de 2015

Arizona Baby, No Room, Island Cavall + Exposición Diego Ingold (Sala Luna. Fiesta Gran Maraca Club. 13.03.2015)


Arizona Baby
No Room
Island Cavall
+ Exposición Diego Ingold

Especial Gran Fiesta Molta Barra 7 años

Lugar: Sala Luna fiesta Gran Maraca Club
Fecha: Viernes 13 de marzo de 2015. 23:00


Descubrí a los Arizona Baby allá por el año 2009 buceando en la web de Subterfuge Records. Fue un encuentro de placer, sin duda, pero no es hasta que los vuelvo a escuchar en el año 2011 en el programa radiofónico Carne Cruda (presentando su proyecto paralelo Dos Bandas y un Destino que posteriormente pasaría a denominarse Corizonas, es decir, Arizona Baby + Los Coronas) cuando decido comprar su segundo álbum Second To None (Subterfuge Records, 2009) edición en vinilo. En mi opinión, el trío confeccionó lo que se podría denominar como “disco redondo”. Todos los temas podían ser single perfectamente. Rock, country y folk se entremezclaban en medio de mucha potencia con tan solo dos guitarras y una batería. Pero el enamoramiento duró poco. Una vez bien alimentado de esta segunda referencia llegó el “hasta  otra” ¿La causa? Mi frenética y obsesiva manía de querer abarcar demasiado (sabiendo perfectamente que no es lo suyo) posteriormente publicarían el EP The Truth, The Whole Truth and Nothing but The Truth (Subterfuge Records, 2012) y el pasado año su último y flamante disco Secred Fires (Subterfuge Records, 2014)

Me dispongo, en solitario, como tantas otras veces, a clavarme los prácticamente cincuenta quilómetros que me separan de Palma. Aunque está vez, tengo el placer de encontrarme con el amigo José Luis Luna que se encarga de las fotografías de esta crónica. Aunque es bastante imperdonable, es la primera vez que asisto a un concierto organizado por el  Gran Maraca Club (antes Jarana Club), local que desde que abrió en el año 2011 ha albergado multitud de conciertos con artistas de lo más interesantes. Algunos ejemplos: Pony Bravo, Lost Fills, Za!, Guadalupe Plata, Ceremoney… efectivamente, apuesta clara por los músicos tanto locales como de la península. Y es que hay que hacer un paréntesis para hablar de la escena palmesana. En mi opinión, que puede ser equivocada, diría que goza de muy buena salud al menos en lo que a proyectos y espacios se refiere. Por una parte tenemos desde hace muchos años la sala Es Gremi (antes denominada Sala Assaig), el mencionado Maraca Club, la sala Sabotage, el Cultura Club, Sa Possessió… cada fin de semana hay mucho donde elegir. El problema, para la gente que vive lejos de Palma, es la distancia y la gran escasez de proyectos fuera de ciutat

Esta noche, dentro del Especial Fiesta Molta Barra 7 años, actúan Island Cavall, No Room y Arizona Baby. Entre actuaciones, los DJ’s El Papa Negro, Conejo Manso y Niño Caracol seleccionan música para la fiesta, además de la exposición “Gente Muerta Sin Piel” del polifacético Diego Ingold.


Island Cavall, grupo que entra en última instancia en el cartel substituyendo a Monster Ones (baja por motivos personales) realiza un concierto realmente inteligente en su planteamiento. Con la difícil papeleta de ser el primer grupo de la noche, cargando con la frialdad inicial, tema tras tema captan la atención del público con su particular proyecto que camina entre el folk experimental y el rock con pinceladas de western. Buena capacidad para crear ambiente y envolver al público. Un acierto el uso de la distorsión en la voz del cantante y guitarrista que dota al conjunto de una sonoridad especial además de ser realmente curioso por lo visual, utilizan un híbrido entre micro y teléfono. Aunque tenía muchas ganas de ver a los Monster Ones, creo que el estilo de los Island Cavall tal vez sea más lógico (o adecuado) en el día de hoy


El inicio del concierto de No Room, con su cantante y guitarrista Nacho Valestrini en solitario, en cierta manera me recuerda a nuestro Luis Alberto Segura (L.A.) en sus apariciones acústicas. Puede que sea una influencia en su música. De todas maneras, el global del proyecto No Room está alejado de lo que es L.A. Se podría decir que su música contiene algunas características de la música indie, aunque también desprende buenos momentos de pop-rock, incluso hay algo de folk. A destacar la luminosidad que desprenden los temas. El conjunto demuestra muy buena compenetración y además, añade instrumentos como el violín y el banjo ofreciendo más riqueza de matices. Buen proyecto que espero que tenga continuidad. Puede gustar más o menos el estilo que practican, pero no se les puede reprochar la calidad musical, la energía que desprenden así como la rotundidad de los temas.


A las 02:30 de la mañana (aproximadamente), suben al escenario los tres integrantes de Arizona Baby. Y el concierto ofrecido por los vallisoletanos es lo que uno se espera. Tal vez incluso multiplicado. A través de su carismático cantante y guitarrista Javier Vielba, que ejerce nunca más bien dicho de predicador, van desgranando canciones que hacen las delicias del numeroso público “acercaos para que nuestros fluidos se mezclen”. Por cierto, hay un pequeño incidente poco después de empezar el concierto, Vielba rompe una cuerda de la guitarra que arregla rapidísimamente mientras el resto de la formación improvisa un “interludio” para la ocasión. Siempre es especial un momento que para el grupo puede ser inoportuno. Sigue el concierto y aunque servidor está terriblemente cansado por circunstancias evidentes como la hora y por otras personales, el disfrute es máxime por la desenfrenada avalancha de rock, folk, country, blues, western…. que recibo y que me producen felicidad y movilidad constante en mi cuerpo. De principio a fin, la energía que el grupo transmite, da fuerzas a los asistentes para que sus cuerpos ejerciten pequeños espasmos en sus articulaciones. En sus cuellos. Prácticamente una hora y media de excelente concierto. El hecho de que el trío se baste para encandilar al público únicamente con dos guitarras acústicas, una batería y la voz del predicador se sitúa entre anecdótico y reflexivo. Tanto con tan poco. 



No quiero acabar la crónica sin comentar la exposición de Diego Ingold. Da la casualidad de que hace unos meses, visité por primera vez la sala Sabotage para ver a The Last Dandies y en aquella ocasión ya pude disfrutar de otra magnífica exposición del autor. Para esta ocasión, presenta Gente muerta sin piel. “Hipotecado” se podía leer en algunas de la obras. Y claro, podéis imaginar que la cara de un hipotecado no es precisamente alegre. Nuevamente fuerte crítica al sistema a través de la representación de la figura humana que se somete a las reglas. Autor muy recomendable que, además de artista plástico, es actor de teatro en el también, iba a decir recomendable, pero diré imprescindible Trampa Teatre.

Me despido con una de las últimas frases de Javier Vielba de Arizona Baby al final del concierto. Decía algo así como “Recordad, somos humanos, que no os conviertan en Robots”
 
Texto: © Jesús Mateu Rosselló, 2015
Fotos: © Jose Luís Luna Rocafort, 2015